Desafortunadamente, no existe una dieta perfecta para el hipotiroidismo, al igual que no hay una dieta perfecta que funcione para todas las personas. Cada individuo tiene necesidades nutricionales diferentes, aunque todos necesitamos los mismos nutrientes básicos para mantenernos saludables. Puede resultar abrumador tratar de encontrar la dieta adecuada para el hipotiroidismo. Hay millones de resultados de búsqueda sobre este tema, lo cual demuestra la cantidad de información y opiniones disponibles. Sin embargo, si estás luchando por controlar los síntomas de hipotiroidismo, tu alimentación puede ser una herramienta valiosa para tomar el control.
La tiroides, una glándula con forma de mariposa ubicada en la base del cuello, juega un papel crucial en la regulación del uso de energía del cuerpo y otras funciones esenciales. El hipotiroidismo ocurre cuando la producción de hormonas tiroideas disminuye. Cuando hay una deficiencia de hormonas tiroideas, el metabolismo del cuerpo se ralentiza, lo que significa que quema calorías en reposo más lentamente.
Dependiendo de la composición del microbioma en nuestro tracto digestivo, así como de nuestro material genético, ciertos alimentos pueden ser fuentes de curación o de estrés.
Cada persona es única, con sensibilidades individuales. Es importante escuchar a tu cuerpo y aprender qué toleras o no. Puede ser que descubras que tu cuerpo responde especialmente bien a una dieta u otra, o que necesites hacer modificaciones para que un método de alimentación funcione para ti.
En esencia, seguir una dieta amigable para la tiroides adaptada a tus necesidades específicas puede ayudar a minimizar tus síntomas y mantener un peso saludable. Recomendamos consumir alimentos integrales, sin procesar y proteínas magras. Algunos principios pueden orientarte para descubrir qué es curativo para ti:
Identifica tus sensibilidades
Cada persona tiene sensibilidades únicas a ciertos alimentos, micronutrientes, aditivos alimentarios y productos químicos.
Elimina los desencadenantes
Si sabes que ciertos alimentos empeoran tu sistema, evítalos. Aunque esto parece obvio, es más fácil decirlo que hacerlo. Muchos de nosotros amamos ciertos alimentos porque son parte de nuestra tradición, cultura o entorno. Sin embargo, debes evaluar los beneficios de consumir alimentos que desencadenen inflamación, brotes autoinmunes o malestar gastrointestinal.
Incorpora alimentos que sanen
Algunos alimentos contienen nutrientes restauradores que pueden ayudar a mejorar la función tiroidea, como el zinc, el selenio, los omega-3 y el yodo.
Reabastece los nutrientes
Si eres sensible o alérgico a ciertos alimentos, puedes desarrollar problemas de absorción de nutrientes y crear un desequilibrio bacteriano en tu flora intestinal. Con el tiempo, esto puede llevar a la desnutrición. Alimenta tu cuerpo con alimentos no irritantes que sean ricos en nutrientes esenciales.
Hidrátate
El agua es la sustancia química principal en el cuerpo humano. Representa más del 60% de nuestro peso corporal. A menos que tengas una condición que requiera limitar la ingesta de líquidos, como insuficiencia cardíaca o renal, concéntrate en beber suficiente agua.